La informática forense enfrenta varios desafíos, como la constante evolución de la tecnología, lo que requiere que los profesionales estén continuamente actualizando sus conocimientos y herramientas. Además, la ética juega un papel crucial, ya que la privacidad y la protección de datos personales deben ser respetadas en todo momento, especialmente considerando las leyes de protección de datos como GDPR en Europa o CCPA en California.
La informática forense es vital para resolver delitos, proteger activos e información corporativa y responder a incidentes de seguridad informática. Con el aumento de la dependencia de la tecnología digital, su importancia y relevancia solo seguirán creciendo.